OBSOLESCENCIA PROGRAMADA: UNA CATÁSTROFE MEDIOAMBIENTAL

Si alguna vez ha comprado un producto para su empresa, solo para encontrarse con que doce meses después sale al mercado una versión modificada, que deja al suyo obsoleto, puede decirse que ha comprado a una empresa con la obsolescencia programada como parte fundamental de su estrategia.

Es frustrante y es un problema al que se enfrentan las empresas y los consumidores de numerosos sectores, desde teléfonos hasta moda rápida.

Pero ha llegado el momento de dejar de alimentar constantemente esta cadena lineal de residuos. La obsolescencia programada tiene un coste desastroso para el medio ambiente, así como para los resultados financieros y la reputación de su empresa.

Costes medioambientales y empresariales

En la categoría de obsolescencia programada no solo entran las actualizaciones y modificaciones de productos.   Los productos que a primera vista tienen un precio atractivo pierden rápidamente su valor si tenemos en cuenta lo rápido que será necesario sustituirlos.  Todos hemos oído la frase «Lo barato sale caro».

Aparte del obvio impacto financiero a largo plazo de los productos de mala calidad que necesitan reemplazarse con frecuencia, ¿qué sucede con el impacto medioambiental de los productos con un ciclo de vida corto?

En la UE se enviaron 52 millones de toneladas de residuos municipales a los vertederos en 2020.*

El impacto medioambiental de los vertederos es devastador. La basura en descomposición genera altos niveles de gas metano y CO2, que contribuyen al calentamiento global. Las sustancias tóxicas que se encuentran en los vertederos se filtran a la tierra y a las aguas subterráneas.

La buena noticia es que, aunque queda un largo camino por recorrer, se está reduciendo la cantidad de residuos que se envían a los vertederos: desde 1995 se ha producido un descenso medio anual de alrededor del 4 %.

Este descenso representa un cambio en la forma en que las empresas y los consumidores ven los residuos.

La obsolescencia programada puede costar a la gente hasta 50 000 euros a lo largo de su vida.** Sin embargo, lo que está impulsando un cambio hacia la durabilidad y la calidad por encima de los artículos baratos y de usar y tirar no es solo la prudencia sobre el impacto en sus finanzas.  El deseo de optar por la elección más ecológica está afectando a la toma de decisiones.  El 88 % de los consumidores desean activamente que las marcas les ayuden a ser más sostenibles.***

Dos tercios de los europeos están dispuestos a pagar más por un producto si se garantiza su funcionamiento durante cinco años, según una encuesta del Eurobarómetro de 2013, la agencia de opinión pública de la UE.****

Como los consumidores aspiran a que las empresas, los productos y los servicios que eligen sean más sostenibles, sus credenciales medioambientales tienen un impacto directo en la reputación de su empresa.  Combinado con el golpe financiero que supone tener que volver a comprar productos que no están hechos para durar, para competir en el mercado actual su empresa debe tener en cuenta la sostenibilidad a todos los niveles.

Compre mejor, desperdicie menos

Pero, ¿cómo podemos optar por la elección más ecológica y comprar mejor?

Piense en qué significa realmente «ecológico»

Los productos reciclados que anuncian sus credenciales ecológicas a menudo son endebles y acaban pronto en el contenedor de reciclaje.

Elegir productos duraderos y de alta calidad para su empresa es una opción más sostenible.  No solo evita que más residuos vayan a parar al vertedero, sino que los costes medioambientales y empresariales de volver a tener que fabricarlos y transportarlos se reducen considerablemente.

Todos los productos desempeñan su papel

Es importante no olvidar que todos los productos de su empresa desempeñan un papel, así que cuando sopese sus credenciales de sostenibilidad, vaya más allá de cambiar los artículos de un solo uso, como los cubiertos o los vasos de plástico.  Por ejemplo, contemple los propios sistemas de gestión de residuos. Los cubos y contenedores robustos resistentes que se pueden usar año tras año son un aspecto tan importante como la basura que deben contener.

Busque una promesa de construcción duradera

Las garantías pueden ser un indicador importante de que los productos son duraderos y de que el fabricante confía en que no tendrán que ser sustituidos.  Todos nuestros cubos tienen una garantía de hasta 10 años.  Se construyen con materiales comerciales de la más alta calidad, lo que significa que están hechos para durar.

El reciclaje juega un papel importante

Aunque la durabilidad es clave en lo que se refiere a la sostenibilidad, el reciclaje también juega un papel importante.  Desde la pandemia del COVID-19, el 50 % de las instalaciones se enfrentan a retos en la gestión de más tipos de residuos debido al aumento del uso de productos desechables.***** Asegurarse de que los sistemas de reciclaje que elija sean a su vez duraderos y de larga duración es tan importante como facilitar el reciclaje en su empresa.  Nuestros sistemas de reciclaje Slim Jim tienen una garantía de 10 años, y sus colores y tapas personalizables le permiten crear una solución que se adapte a las necesidades de su instalación y ayude a los usuarios para que el reciclaje se convierta en un hábito.

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